Lo que vivió Will Smith esta noche en la entrega de los Óscar es increíble; por acá nombramos a este tipo de cosas de lo sublime a lo ridículo. Todo comenzó cuando el comediante Chris Rock estaba en el escenario para presentar el galardón del Óscar a mejor actor. Allí hizo referencia, que entre el público se encontraba Will Smith nominado por El Método Williams en compañía de su esposa; Jada Pinket Smith.
Pero, en un segundo las cosas empezaron a salirse de control, cuando el actor Chris Rock saludo a la esposa de Smith haciéndole una broma referente a los problemas de alopecia que presenta la actriz.
“Jada, te adoro. Estoy deseando verte en la teniente O’Neil 2”. Esto aludiendo la película de 1997, La teniente O’Neil, protagonizada por Demi Moore en la que aparece con la cabeza rapada.
Will Smith del cielo a la tierra y cuando la contradicción te enmudece
Así que la broma no cayó bien en el público y menos al protagonista de El Príncipe de Bel-Air Will Smith. Este, subió al escenario llegó hasta el presentador; y de improviso le asestó una cachetada de padre y señor nuestro.
Por si fuera poco, tras regresar a su asiento el actor gritó estas palabras a su colega en forma reiterada: “Mantén el nombre de mi esposa fuera de tu puta boca”. Todo eso salió al aire en plena gala en lo que se tornó en un momento incómodo. Al principio se pensó que era algo preparado, sin embargo, la tensión reinante decía otra cosa.
Pero la noche deparaba sorpresas agridulces, porque Will Smith debió subir de nuevo al escenario para recibir el Óscar al Mejor Actor y llegó el momento de las contradicciones. Obviamente que por la emoción el actor le tocó dar el discurso con lágrimas en los ojos; pero lo embarazoso del anterior momento lo perseguía. “El amor a veces nos hace cometer locuras”, atinó a decir.

Tras reconocer que había fallado y decir palabras más, palabras menos, que hay que saber aguantar insultos llegó otro momento clave de la noche. El oscarizado citó a Denzel Washington quien le había dicho previamente esto: “Denzel Washington me lo acaba de decir. ‘Ojo: en el momento más importante de tu vida es cuando llama a la puerta el demonio’”.
En lo particular estoy arrepentido de no haber visto la gala, no obstante, están los videos para recordar este momento que pasará a la historia de los Óscar. Eso sí, no se pierdan la cara de los asistentes a la gala durante el momento del golpe.
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